El seleccionador de Portugal, Fernando Santos, cuyo equipo se medirá este sábado con Italia en Milán (norte) en la Liga de Naciones, pidió este viernes que se haga «justicia» y que Cristiano Ronaldo gane el próximo Balón de Oro.
Pese a que CR7 no forme parte de la convocatoria de Portugal y que esté trabajando en Turín de cara a los próximos compromisos del Juventus, el astro luso tuvo protagonismo en la rueda de prensa previa al Italia-Portugal de San Siro y Fernando Santos no dudó en definirle el «mejor del mundo».
«Ningún equipo que cuente con Cristiano puede negar que tenerle ayuda, es el mejor del mundo. Es importante que lo demuestre en cada partido. Ojalá se haga justicia y gane el Balón de Oro», afirmó el preparador luso.
Cristiano no formó parte de la convocatoria de Portugal en los tres primeros parones de selecciones de esta campaña para guardar energías y Fernando Santos todavía no aclaró cuándo CR7 volverá a agregarse a la concentración de la selección campeona de Europa.
«Veremos», dijo, agregando que su grupo solo está enfocado en la preparación del partido contra Italia.
Portugal buscará este sábado seguir con el pleno de puntos en esta Liga de Naciones, tras ganar contra Polonia y la propia Italia y Santos advirtió de que el seleccionado «azzurro» ha tenido «una evolución importante en los últimos dos meses».
«Han cambiado manera de jugar, con muchos jugadores de características distintas con respecto al partido de Lisboa (en la primera vuelta, terminado 1-0 para Portugal)», consideró.
«Nos hemos preparado, tenemos mucho respeto para Italia, es una de las selecciones históricas. Será un partido de alto nivel, pero creo que mis jugadores tienen opciones de triunfar», prosiguió.
Portugal llega a la cita de San Siro como líder del grupo 3 de la Liga A con dos puntos de ventaja sobre Italia, segunda, y con un partido menos, por lo que será suficiente un empate este sábado para conseguir el pase matemático a la fase final del próximo junio.
Incluso en caso de derrota, los lusos seguirían siendo dueños de su destino; sellarían el pase a la fase final con un triunfo en el último encuentro, que disputarán en casa contra Polonia, ya matemáticamente descendida a la Liga B de la Liga de Naciones.