Formar a los jugadores desde sus ligas menores y que tengan buenos fundamentos psicológicos o tácticos cuando lleguen a la máxima categoría, es una tarea que se debe desarrollar de forma meticulosa y que todo equipo debe fortalecer a lo interno de sus clubes.
Para nadie es un secreto que a lo largo de los distintos rincones de nuestro país hay jóvenes promesas que poco a poco dan sus primeros pasos en el balompié, por ejemplo, una zona que ha destacado por eso ha sido el caribe nacional.
Johnny Chaves, estratega de AD Santos, apuntó que las ligas menores son etapas muy sensibles, pues a partir de ahí se empiezan a generar los conceptos que necesitan para que lleguen con buenas herramientas a Primera División.
“Es una etapa muy sensible donde el sistema nervioso central está asimilando todo, entonces hay que darles buenos ejemplos. Cuando tienen 13 años se les enseñan sobre la posesión del balón y a partir de los 15 años un once contra once. Si durante esas etapas se van con los fundamentos bien trabajados no van a tener problemas”; dijo Chaves.
El experimentado entrenador resaltó cómo es que trabajan a los jóvenes en las ligas menores de AD Santos, explicó que para ellos debe ser secundario ganar -aunque es importante- ya que primero está el desarrollo.
“Es importante ponerlos a jugar dos contra dos o tres contra tres para que toquen más veces el balón. También trabajamos para que conduzcan el balón en una sola línea y así les damos dirección. Para los muchachos es secundario ganar, pues es vale más el desarrollo. Se necesita mucho la corrección del entrenador (cómo perfilarse o cómo recibir), que insistan mucho en la técnica y táctica”; apuntó.
“Buscamos capacitarlos. Si jugamos en casa, priorizamos ataque y contrapresión; si jugamos de visita sería defensa y transición. Se tiene que ir de acuerdo a la competencia. Necesitamos que lleguen a primera bien con los fundamentos porque ya ahí no hay tiempo para seguir desarrollando, que tengan los conceptos claros y entendidos con sus planes de juego”; finalizó.
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