Una vez más, al igual que en la fecha FIFA de setiembre, Luis Fernando Suárez pagó los cambios erróneos que hizo contra la Selección de Honduras. Aunque el resultado de empate en San Pedro Sula es positivo, lo cierto es que la Tricolor llega obligada a vencer a El Salvador en casa.
“La actitud muy buena, me parece que el equipo siempre fue ordenado en defensa. Jugar acá es muy complicado porque el clima es difícil por la humedad. Me queda la sensación que el primer tiempo tuvo que haber sido más para nosotros”, analizó el técnico.
Al inicio de la segunda parte, Suárez decidió sacar a Johan Venegas y Jonathan Moya. Después de eso, pasaron prácticamente 35 minutos sin ninguna variante. Hasta el minuto 81 el técnico volvió a hacer cambios.
“Nosotros queríamos tener mucha velocidad, queríamos aprovechar el espacio que estaba dando Honduras cuando estaba tirando todos los marcadores al ataque, pero esa situación no se dio”, manifestó sobre el ingreso de Luis Díaz y Jimmy Marín.
Costa Rica perdió dominio del medio campo y nunca tuvo conexiones con la zona de ataque que era protagonizada por Díaz, Marín y Campbell. Según el timonel, el desgaste físico de Celso Borges influyó para perder el control del partido.
“Teníamos problemas en recuperación, había un desgaste grande por parte de Celso. Había que apostar por tener mucha más seguridad, por esa situación entró Galo y creo que ayudó mucho a Yeltsin cuando entró”, expresó.
Durante los últimos minutos, Costa Rica fue víctima de la insistencia de Honduras por buscar la anotación. El mejor reflejo de eso fue la espectacular jugada de Keylor Navas, quien voló y ahogó el grito de gol de los catrachos.
“Para uno clasificar necesita de un grandísimo arquero, hubo una jugada donde creo que el único que hace esa tapada es Keylor Navas. Esa situación me parece que también hay que valorarla. El empate es justo”, destacó Suárez.
Ahora, la Sele recibirá el próximo domingo a la selección de El Salvador en el Estadio Nacional. Aunque la Federación Costarricense de Fútbol había anunciado que se jugaría sin público, los jerarcas solicitan al Ministerio de Salud que se permita 5 mil aficionados con el protocolo utilizado en setiembre.