(EFE) La FIFA decidirá más adelante cuándo se disputará el Mundial de Clubes que iba a celebrarse entre junio y julio de 2021, tras aceptar las nuevas fechas de la Eurocopa y la Copa América por su aplazamiento al año que viene, y creará un grupo de trabajo con las Confederaciones para acordar soluciones ante la situación generada por la pandemia del coronavirus.
La mesa del Consejo de la FIFA se reunió este miércoles de manera telefónica para abordar las circunstancias excepcionales ante la enfermedad y decidió por unanimidad incluir en el calendario internacional las nuevas fechas propuestas por la CONMEBOL y la UEFA para la Copa América (12 de junio al 12 de julio de 2021) y la Eurocopa (11 de junio al 11 de julio de 2021).
Tras el aplazamiento el martes de ambas competiciones, la FIFA avanzó la posibilidad de trasladar las fechas del nuevo Mundial de Clubes, que iba a disputarse del 17 de junio al 4 de julio de 2021 en China, y planteó desde retrasarlo dentro de ese año, a pasarlo a 2022 o a 2023.
Tras la reunión de este miércoles, la FIFA anunció que creará un grupo de trabajo con las seis confederaciones, con las que estudiará la evolución de la situación y trabajará de forma coordinada para tomar acuerdos respecto al calendario, los traspasos de jugadores y la creación de un fondo de apoyo para hacer frente al impacto económico causado por la pandemia.
En relación al calendario, el objetivo es «asegurar que se encuentran soluciones globales apropiadas para las competiciones en todos los niveles, considerando las necesidades de todos los grupos de interés con la salud de todos los participantes como absoluta prioridad».
En materia de traspasos de jugadores, la FIFA contempla evaluar la necesidad de introducir enmiendas o dispensas temporales en su Reglamento para el Estatuto y la Transferencia de jugadores, dirigidas a proteger los contratos tanto para clubes como para jugadores, y ajustar los periodos de registro de éstos.
La otra medida aprobada se refiere a un «potencial fondo de apoyo» ante el impacto económico generado por la pandemia en cada continente, además de analizar si se requiere un fondo a nivel global y en ese caso concreto si se deben definir mecanismos de apoyo.
Según adelantó el martes el presidente de la FIFA, Gianni Infantino, la mesa del Consejo dio luz verde este miércoles a la donación de 10 millones de dólares a la Organización Mundial de la Salud para la búsqueda de soluciones ante la enfermedad.
Infantino aseguró que «esta situación excepcional requiere medidas excepcionales y decisiones». «Esta crisis impacta en el mundo entero y por eso se necesitan soluciones que tenga en cuenta los intereses de todas los grupos de interés del mundo entero», dijo.
El presidente destacó que la FIFA este miércoles ha «demostrado otra vez un espíritu de cooperación, solidaridad y unidad», y apuntó que «esta debe ser la dirección para avanzar», tras agradecer a todos los presidentes de confederaciones sus contribuciones positivas y esfuerzos.
«La FIFA se mantendrá un contacto cercano con todas las partes interesadas para evaluar y dar los pasos necesarios para llegar a acuerdos en los temas a los que nos enfrentamos. Cuento con el apoyo de toda la comunidad del fútbol para ir hacia adelante», aseguró.