(EFE) Levante y Espanyol igualaron a dos en un encuentro intenso y de alternativas, marcado por la emoción y las ocasiones de gol de los minutos finales y en el que lo locales aguantaron con un hombres menos durante el último cuarto de hora.
Tras un primer tiempo insulso, la segunda mitad mostró a dos equipos que quisieron ganar y que a punto estuvieron de hacerlo con jugadas claras para marcar en los compases finales, aunque al Levante el punto le sabe a poco para tratar de alejarse del descenso.
El dominio inicial del Levante no solo fue infructuoso, sino que en el primer contragolpe del Espanyol se abrió el marcador tras una jugada en la Borja Iglesias remató con facilidad desde el borde del área.
No cambió el partido tras el gol, ya que la iniciativa se mantuvo para los locales, aunque con un fútbol inconexo y sin ritmo, ante el que la defensa del Espanyol no sufría.
Solo en algunas penetraciones por la banda conseguían los locales acercarse al área de Diego López, pero al equipo le faltaba remate y su trabajo quedaba casi siempre en acciones inofensivas.
El conjunto visitante solo se hacía con la pelota de forma esporádica y cuando la tenía, aunque la manejaba bien, le faltaba profundidad.
La mejor ocasión para el Levante llegó en una acción individual de Morales que Borja Mayoral remató a las manos del meta espanyolista (m.34). El primer periodo se cerró con un gol anulado al Espanyol en un disparo de Marc Roca, que había hecho manos en la acción previa al disparo.
El partido dio un giro notable tras el descanso, ya que el Espanyol entró muy enchufado ante un Levante sin ideas y se adueñó del balón, lo que le permitió jugar muy cerca del área de Aitor Fernández, al que puso en apuros en más de una ocasión.
Durante unos minutos, dio la sensación de que el 0-2 estaba más cerca que el 1-1, aunque el Levante se repuso con un par de acciones aisladas en las que, nuevamente, falló en el último remate, hasta que en un falta magníficamente lanzada por Campaña, Vezo logró de cabeza el tanto del empate.
Sin embargo, tres minutos después, una jugada embarullada en el área local, acabó con un potente disparo de Marc Roca que devolvió al Espanyol la ventaja en el marcador y puso el encuentro donde estaba tres minutos antes.
No se había rendido el Levante y en una de las mejores acciones de todo el partido llegó el 2-2 tras un gran zurdazo de Rochina (m.71), jugador que en la acción siguiente vio la segunda cartulina amarilla.
La expulsión modificó la dinámica del encuentro, ya que el Levante paso a debatirse entre la necesidad de salvar un punto con un hombre menos y el apoyo del público que le aupaba en pos del triunfo.
Al Espanyol, por contra, no le quedaba otra que aprovechar la superioridad para tratar e llevarse los tres puntos, lo que dio una gran emoción a los minutos finales del choque, con alternativas ante ambas porterías, pues ningún equipo se rindió, con un balón al poste incluido del espanyolista Hernán Pérez (m, 87).
Al final, el empate reflejó el equilibrio en un encuentro en el que la derrota hubiera sido excesivo castigo si uno hubiera perdido.
Final al Ciutat de València! S'escapa la victòria! Llàstima!#RCDE | #Volem | #EspanyoldeBarcelona | #LevanteEspanyol pic.twitter.com/Tqd1W5zPCr
— RCD Espanyol de Barcelona (@RCDEspanyol) April 21, 2019