La delación de futbol costarricense no pasó un buen rato en lo que iba a ser su viaje a Irak para enfrentar a la escuadra de dicho país en en partido amistoso.
Los ticos se trasladaron por tierra desde Kuwait en un viaje de aproximadamente dos horas, sin embargo, cuando llegaron a la frontera de Irak se encontraron un panorama totalmente diferente al que les habían prometido.
Según, la Fedefútbol la empresa que los contrató había pactado que los nacionales iban a tener un trato especial por lo que no les iban a sellar el pasaporte en migración.
Sin embargo, cuando llegaron al lugar las autoridades les solicitaron el documento de identificación para escanearlos situación a la que los costarricenses dieron un rotundo no.
«La verdad es que ellos querían dejarse los pasaportes y nosotros no íbamos a permitir entrar a este país totalmente con los pasaportes en manos del gobierno iraquí.
En la mañana que estuve en la reunión con el presidente de la Federación de Irak y el presidente de la Federación de Kuwait, nosotros fuimos muy claros aquí hay un factor determinante y no es ni siquiera habernos pedido los pasaportes, es que ellos querían apoderarse de los pasaportes», afirmó Rodolfo Villalobos.
Esta situación provocó que La Sele no jugara el amistoso pactado ante Irak y se devolviera hasta su puesto de concentración en Kuwait.
De esta manera, la escuadra nacional llegará a la Copa del Mundo con la desventaja de no haber tenido enfrentamientos en los últimos días, pues sus rivales han jugado partidos en las ultimas horas.