Desde que se reinició el torneo, tras la pausa por el Coronavirus, Wálter Centeno ha mencionado en reiteradas ocasiones que los jugadores del banquillo iban a ser claves en un momento del torneo y que la historia marca que los suplentes son los que ganan campeonatos.
En las últimas fechas del certamen, Byron Bonilla vino desde la banca a cambiar la historia en algunos encuentros. Ante Alajuelense, en el primer partido de la final, sin duda Esteban Rodríguez se convirtió en un factor clave por la victoria. Centeno reconoce la actitud de sus jugadores, pese a estar en el banquillo.
“Aprendí que cuando uno no juega, tiene que trabajar doble. Tiene que entrenar más que el que está jugando, porque no tiene tiempo de partido. La historia dice que los que no juegan, son los que más entrenan, eso es trabajo. A pesar de todo de que no jugaron, ellos nunca se quejaron. Al final el fútbol va a premiar al que se esfuerza”, manifestó el técnico morado en conferencia.
Aunque el Saprissa va con una ventaja al juego de vuelta, Centeno cree que la clave para no perder esa ventaja está en la concentración, la cual comienza desde antes del partido, sin dejar que factores externos entren en la cabeza del jugador.
“Estamos en un momento crucial donde el futbolista tiene que aislarse. Tiene que visualizar cómo va a ser el partido. Para manejar las emociones la única manera que conozco es el estar aislado. El tiempo me ha enseñado muchas de esas cosas”, explicó.
Incluso, Centeno resaltó la importancia de que los jugadores estén en sus casas porque las concentraciones se vuelven “aburridas”.