Sin duda alguna, la llegada de Óscar Duarte al Levante se referencia directamente al último gran jugador que salió de este equipo, además de ser compatriota, es el caso de Keylor Navas.
Para Duarte, una ilusión es poder dejar alguna marca en el conjunto granota, donde el arquero que ahora defiende los colores del Real Madrid hizo una pequeña historia.
“Aquí la gente lo recuerda (a Keylor) con mucho cariño, porque tuvo una gran temporada y todo el tiempo que estuvo aquí, él dejó un legado y eso a uno como amigo lo llena de alegría y ojalá uno también poder dejar una huella”, dijo.
Con Keylor mantiene una amistad, por su tiempo Selección Nacional y convivir en dos mundiales, además de estar en la misma liga desde hace tres años.
“Tenemos bonita amistad, nuestras familias también y cada vez que vamos a la selección hablamos un poco, él siempre recuerda cosas buenas de aquí de cómo lo trataron y cómo me están tratando, y eso es algo más que nos une”, destacó.
Jugar en contra es algo interesante, tanto para los aficionados costarricenses como para ellos mismos, pues el recuerdo de haberse visto las caras es lo que perdura en su memoria.
“Siempre es algo diferente, se sabe que está en un equipo grande, siempre que nos vemos es especial, y cuando jugamos en contra también, ahora que tenemos la oportunidad, máxime que el también jugó aquí, eso es algo diferente, aprovechar y disfrutar que es lo que uno se queda al final”, sentenció.
Duarte esperará ser convocado este fin de semana con el Levante para poder debutar en La Liga.
Lea también: Navas se entrena con normalidad a la espera de resolver su futuro