(EFE) La UEFA ha abierto un expediente disciplinario al brasileño Neymar por sus declaraciones tras la eliminación de su equipo, el París Saint Germain francés, ante el Manchester United en octavos de final de la Liga de Campeones. El partido, jugado el pasado 6 de marzo en el campo del PSG, terminó con victoria inglesa por 1-3.
Neymar, lesionado, siguió el encuentro desde la grada y en los últimos minutos desde la banda, donde se encontraba cuando el colegiado, ayudado por el VAR, señaló un penalti de Kimpembe en el tiempo de descuento que, marcado por Raishford, supuso la eliminación de los franceses.
Neymar, lesionado, siguió el encuentro desde la grada y en los últimos minutos desde la banda, donde se encontraba cuando el colegiado, ayudado por el VAR, señaló un penalti de Kimpembe en el tiempo de descuento que, marcado por Raishford, supuso la eliminación de los franceses.
El brasileño calificó de “vergüenza” la decisión arbitral y dijo en las redes sociales que no se podía pitar penalti en esa jugada. “Es una vergüenza. Ponen a cuatro tíos que no entienden de fútbol para analizar una jugada… ¿Cómo va a poner manos de espaldas? El penalti no existe”, escribió en Instagram.
El expediente disciplinario que se le ha abierto se base en el artículo 31.3 del reglamento de la UEFA.
En 2018 el PSG tuvo 540 millones de euros de ingresos, lo que supone que se han quintuplicado desde 2011 cuando lo compró Qatar Sports Investments (QSI), propiedad del fondo soberano de Qatar. Esas cifras del informe anual publicado este miércoles figuran en un comunicado en el que el club de la capital francesa destaca su desarrollo internacional, con dos nuevas oficinas en Singapur y Nueva York, una tienda exclusiva en Tokio y una decena de nuevos clubes de hinchas, que ya son 89.
También hace hincapié en la visibilidad de la marca, como lo ilustran las ventas de sus camisetas, que superaron las 800.000 en la temporada 2017-2018, gracias en particular a sus estrellas Neymar y Mbappé, cuyos fichajes le costaron respectivamente 222 y 180 millones de euros.
Las ventas de entradas para el Parque de los Príncipes le reportaron 61,2 millones de euros, un 16 % más que la temporada precedente, con una tasa de ocupación del estadio del 99 % (tras el 95 %). A eso se añaden 38,7 millones de euros por los palcos de las tribunas.
Las ventas de camisetas y de productos derivados supusieron 55,3 millones de euros, lo que significa casi 20 millones más. Por su parte, el patrocinio le aportó 94,1 millones de euros, una cifra inferior a los 108 millones conseguidos la temporada precedente.
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