(EFE) La FIFA y Qatar 2022 auguraron «la mejor Copa del Mundo» a finales de este año, por primera vez en un país árabe, durante el Foro Económico Mundial de Davos, donde destacaron la previsión de que sea seguida por 5.000 millones de personas y su poder de reunir a aficionados de distintas culturas.
«Será el primer evento deportivo con total asistencia de público después de la pandemia devastadora. Estoy feliz de reunir al mundo y será la primera vez en el mundo árabe, nuestra región, que ha sufrido durante mucho tiempo. Organizar el Mundial traerá esperanza a los jóvenes de la región y contribuirá a conseguir la comprensión entre diferentes culturas», aseguró el emir de Catar, el jeque Tamim bin Hamad Al Thani.
El emir destacó que «el pueblo de Qatar quiere demostrar su hospitalidad», y que «la Copa del Mundo es el viaje de un duro trabajo y determinación».
Tras las palabras del emir, el presidente de la FIFA, Gianni Infantino, avanzó la previsión de que 5.000 millones verán la competición y resaltó el poder de unión que tiene el fútbol, para congregar a aficionados de distintas culturas en una competición y para que varios países colaboren en la organización de competiciones, como ocurrirá en 2026 con México, Estados Unidos y Canadá y como ocurrió en 2002 con Corea y Japón.
«Es un año especial. Salimos de la pandemia y tenemos la mejor excusa para reunir al mundo. Vengan a Qatar. Va a ser la mejor Copa del Mundo, no solo desde el punto de vista del fútbol, también por vivir la experiencia de la cultura árabe, esto quizá puede ayudar a que el mundo sea un lugar mejor«, dijo.
En el contexto económico de Davos, Infantino habló de las «dimensiones específicas» del fútbol tanto en el ámbito social, como en el emocional y el económico, que es muy importante, ya que la economía del fútbol, a una escala global, tiene una rentabilidad de millones de dólares».
«Hay que destacar el potencial económico que tiene en el mundo entero, ha cambiado la vida de muchísimas personas», apuntó Infantino, antes de referirse a iniciativas de la FIFA como su inversión de 3.000 millones de dólares en los últimos seis años en el programa «Forward«, «para construir infraestructuras y que los niños puedan jugar», y el plan de ayuda para la covid-19, con 1.500 millones, «para que el fútbol de base siga vivo».
«Hemos puesto nuestras finanzas en orden porque queremos recuperar la confianza, tenemos muchos proyectos que son muy importantes para nuestra sociedad», añadió.
Junto a Infantino, el panel sobre la «fuerza unificadora del deporte» contó también con la participación del el exjugador brasileño Ronaldo Nazario, dos veces campeón del mundo, y el secretario general del Comité Supremo de Entrega y Legado de Qatar 2022, Hassan Al Thawadi.
«A través del fútbol podemos lograr un mundo mejor, en la Copa del Mundo todos compartimos mesa, bar y estadio donde todos nos reunimos a disfrutar de ella. Yo tengo un equipo en Brasil, Cruzeiro, y el Valladolid, en España, y tenemos jugadores árabes que cuando hemos jugado contra futbolistas de Israel se han abrazado al acabar, esto no se ve a diario«, relató Ronaldo.
Hassan Al Thawadi recordó lo vivido desde 2010, cuando su país fue elegido por la FIFA para organizar el próximo Mundial, hasta este año, después de celebrar la Copa Árabe, con la asistencia de «personas de todo el mundo».
«Pudimos mostrar al mundo lo que significa para nosotros el fútbol y lo que somos como nación. Hemos abierto nuestros brazos al resto del mundo, para que vean como somos, y eso puede hacerlo la Copa del Mundo, romper con los estereotipos», dijo en el panel, en que intervinieron también el portero senegalés Edouard Mendy, el técnico francés Arsene Wenger, director de desarrollo del fútbol de la FIFA, y la estadounidense Jill Ellis, dos veces ganadora del Mundial femenino.
FUENTE: AGENCIA / EFE